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Cultivar plantas es mucho más fácil cuando se comprenden sus necesidades. Todos sabemos que cualquier especie necesita abonos para crecer, florecer y dar frutos. Porque si no, las carencias nutricionales en plantas no tardarán en aparecer.

Saber detectar qué nutriente es el que demanda una planta, ayudará a solucionar el problema rápidamente. Obviar estas señales, harán que el cultivo en el peor de los casos termine en un desastre.

Clasificación de los nutrientes

Los nutrientes se clasifican en varios grupos. Y ninguno tiene que ver con su importancia, ya que todos lo son por igual. La escasez del elemento que las plantas necesitan en cantidades ínfimas, puede afectar a la asimilación de uno o varios de los que más necesita.

Macronutrientes y micronutrientes

    • Macronutrientes: o también conocidos como nutrientes primarios. Son el nitrógeno, fósforo y potasio, los más demandados por las plantas durante todo el cultivo. También son la base de cualquier abono.
    • Nutrientes secundarios: son el calcio, magnesio y azufre. Su demanda por parte de las plantas no es tan alto, pero, aun así, son nutrientes vitales para el desarrollo y las carencias nutricionales en plantas de alguno de ellos son muy comunes.
    • Micronutrientes: son el boro, cloro, hierro, manganeso, molibdeno, cobre y zinc. La planta necesita estos elementos en muy pequeñas dosis y no suelen presentar ni carencias ni excesos a lo largo del cultivo.
Carencias nutricionales en plantas
Carencias nutricionales en plantas

Nutrientes móviles e inmóviles

Además, todos estos nutrientes pueden ser móviles o inmóviles. Esta clasificación ayudará en gran medida a intuir qué tipos de nutrientes escasean ante una carencia.

    • Nutrientes móviles: son el nitrógeno, fósforo, potasio y magnesio. Tienen la capacidad de traslocarse o trasladarse a zonas de la planta que sufran un déficit de cualquiera de ellos.
    • Nutrientes inmóviles: son el hierro, calcio, boro, cloro, hierro, manganeso, molibdeno, cobre y zinc. Permanecen fijos, sin posibilidad de trasladarse.

Las carencias de nutrientes móviles se observan en primer lugar en las hojas más viejas. La planta moviliza los nutrientes que necesita a las zonas de crecimiento para poder continuar desarrollándose.

Las carencias de nutrientes inmóviles, en cambio, se observan en las hojas jóvenes y zonas de crecimiento, ya que la planta no puede transportarlos ante esta situación a donde más se demandan.

¿Puede una planta morir por carencias?

Una planta no es muy diferente de cualquier ser vivo. Las carencias nutricionales en plantas de un solo nutriente puede afectar a su desarrollo parcial o total. Y si no se soluciona a tiempo, la planta puede llegar a morir.

¿Cómo identificar si una planta tiene carencias?

Las primeras señales de carencias nutricionales en plantas las encontraremos en las hojas. Pérdida, variación o intensificación de su color, desarrollo de quemaduras o manchas, o cambios en su morfología, son lo más frecuente.

También los tallos se pueden volver más débiles, quebradizos o adquirir colores purpúreos. Todo ello indicará que la planta presenta una carencia de algún nutriente. O puede que de varios.

Las carencias nutricionales en plantas de un nutriente específico no son fáciles de detectar en ocasiones. Los déficits de ciertos nutrientes son bastante identificables, pero tan solo hasta cierto punto. Y puede deberse a varios factores.

NUTRIENTE FUNCIÓN SÍNTOMAS DE CARENCIA
Nitrógeno (N) Se utiliza en el crecimiento de hojas y tallos, y para la síntesis de la clorofila Las hojas viejas empiezan a perder color. Los tallos se vuelven débiles. Crecimiento atrofiado
Fósforo (P) Vital para la formación de raíces y flores. Es imprescindible para la transferencia de la energía solar a compuestos químicos Las hojas inferiores y tallos adquieren un color morado. Aparecen manchas necróticas en las hojas
Potasio (K) Se emplea en el sistema respiratorio, el sistema enzimático y la síntesis de proteínas y clorofila. Mantiene la presión interna de agua Los tallos se vuelven débiles. Las hojas viejas oscurecen por los bordes
Calcio (Ca) Es necesario para construir las paredes celulares y el proceso de división celular, contribuye a evitar la acumulación de elementos tóxicos y facilita la absorción de nutrientes Las hojas más jóvenes adquieren un color verde pálido, crecen deformadas o se mueren
Magnesio (Mg) Es un componente de la clorofila, de las enzimas y de las vitaminas. Es necesario para la incorporación de nutrientes Amarilleo entre los nervios de las hojas inferiores, seguida de manchas necróticas
Azufre (S) Ayuda a regular el metabolismo de la planta. Es un constituyente de vitaminas, aminoácidos y proteínas Hojas más jóvenes adquieren un color amarillo. El crecimiento es atrofiado
Boro (B) Juega un importante papel en la división celular, en la floración y en la formación de los frutos Los brotes de crecimiento se mueren. Las hojas más jóvenes se vuelven quebradizas.
Hierro (Fe) Es un componente de las enzimas y funciona como catalizador en la formación de clorofila Clorosis o amarilleamiento generalizado entre los nervios de las hojas más jóvenes
Cobre (Cu) Se usa en la transferencia de cargas eléctricas que realiza la planta para absorber agua y nutrientes. Forma parte de algunas enzimas Muerte de brotes de crecimiento y hojas más jóvenes, que adquieren un color azulado
Cloro (Cl) Se cree que colabora en el desarrollo de raíces y de brotes Amarilleamiento y marchitamiento de las hojas
Manganeso (Mn) Es vital en el sistema fotosintético para la síntesis de la clorofila Los nervios de las hojas adquieren un color verde oscuro, mientras se produce una clorosis intervenal
Molibdeno (Mo) Colabora en la fijación de nitrógeno y en la síntesis de proteínas Amarilleamiento de hojas y tallos débiles
Zinc (Zn) Es vital para la formación de auxinas y almidones Clorosis entre los nervios de las hojas superiores
Principales carencias nutricionales en plantas

Por ejemplo, un amarilleamiento de las hojas viejas nos puede indicar una carencia de nitrógeno. Pero lo más complicado es saber si es consecuencia de su escasez en el suelo o de una mala asimilación aun estando presente. En este caso puede deberse a un pH incorrecto o a algún otro elemento que interfiere en su asimilación.

¿Cuál es el riesgo de que una planta tenga carencias?

Generalmente, con el buen uso de un abono para plantas, las carencias no se presentarán y la planta se desarrollará con fuerza. Puede ser un abono líquido o sólido.

Si en algún momento escasea un nutriente, producirá un efecto en cadena y la planta no tardará en comenzar a secarse hasta su muerte.